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domingo, 20 de marzo de 2016

El verano de los juguetes muertos.

El verano de los juguetes muertos (Toni Hill).

Toni Hill
Toni Hill nació en Barcelona y no estudió para ser escritor. Es psicólogo y ha laborado como traductor para Random House Mondadori. En su trayecto decidió probar suerte y escribir su primera novela negra, la cual se estiró a toda una serie (tres a la fecha) con el Inspector Salgado, miembro de los Mozos de la Escuadra de Barcelona. Ese primer libro recibió excelentes críticas y posicionó al autor entre los nombres a conocer en el género de origen español. "El verano de los juguetes muertos" lo tenía en mi lista de pendientes desde hacía ya algún tiempo. En algún momento de mi vida leí una reseña del libro y me llamó la atención (sin mencionar el título. Es de los que atrapan de la pura curiosidad). Por fin tuve un espacio y logré leerlo. A continuación, mi opinión.

Idea general:
Tres muertes inexplicables Dos promesas de venganza Un verano sofocante El inspector Héctor Salgado lleva semanas apartado del servicio cuando le asignan de manera extraoficial un caso delicado. El aparente suicidio de un joven va complicándose a medida que Salgado se adentra en un mundo de privilegios y abusos de poder. Héctor no solamente deberá enfrentarse a ello sino también a su pasado más turbio, que en el peor momento y de modo inesperado vuelve para ajustar cuentas. Los sueños, el trabajo, la familia, la justicia o los ideales tienen un precio muy alto, pero siempre hay gente dispuesta a pagarlo.

Opinión:
Después de recorrer los senderos de la novela negra por tantos años y haber deslizado los ojos por las páginas de cientos de autores, uno empieza a ponerse exigente. Eso es bueno para los que quieren escuchar consejos y así evitar los libros menos afortunados del género, pero es malo para el lector en cuestión, pues es fácil de decepcionar. No fue el caso con este libro, pero de alguna forma (debido a la publicidad asociada) esperaba algo más. Ya me explico en un momento.
Es un libro interesante. Se lee con rapidez (no porque este escrito para niños), sino porque su prosa es entretenida. Los personajes son profundos, cada uno con sus propios fantasmas y eso es un elemento necesario en la novela negra moderna. No es suficiente con una buena trama (el libro la tiene). Debe existir un componente humano que nos atrape y nos haga identificar con ellos. Toni Hill, en ese sentido, lo consigue. 
El Inspector Héctor Salgado trabaja como inspector en la policía autonómica de Cataluña, conocida como Mozos de Escuadra.  Además, es argentino. El autor, en una entrevista, indicó que la elección de país fue una casualidad, pero no el que fuera extranjero. Quería alguien con una visión diferente de su país y la idiosincrasia argentina le iba de película (melancólico + irónico). Al inicio del libro está suspendido por haber agredido físicamente a un acusado de tráfico humano y responsable del asesinato (o más bien, de inducir al suicidio) de una joven. Es un personaje estable, centrado que, motivado por circunstancias muy especiales, un día pierde el control. Alguien con quien nos podemos identificar y sufrir a su lado las consecuencias de sus actos. 
Mientras está suspendido, su jefe le pide investigar el suicidio de un joven (más para quitarse a la madre de encima que otra cosa. Una madre que lo abandonó cuando estaba pequeño y que ahora está obsesionado con saber si es su culpa o no). El suicidio y las sombras del caso de agresión (el responsable desaparece en misteriosas y algo macabras circunstancias), se mezclan en una trama que disfrutarán.
El problema es que, como dije al inicio de esta sección, cuando uno lleva mucho tiempo en el género, algunas veces las tramas se tornan predecibles. No me costó trabajo ver quien podía ser el responsable de la muerte del joven (aunque si el motivo o la forma). En cuanto al traficante de seres humanos, pude ver lo que planeaban y el giro al final es algo repetitivo (incluso lo mencioné en una reseña anterior). Quitando ese elemento, que me imagino es la apertura para el siguiente libro de la serie, "El verano de los juguetes muertos" es una lectura que no deberían pasar por alto.

Conclusión:
Un libro interesante que me gustó. Bien llevado, con personajes que lo tendrán atado a sus páginas. Una historia que mantiene la tensión hasta el final, con algunos giros inesperados que serán el deleite de los aficionados a los enigmas. Recomendado.
Datos curiosos:
En su trabajo como traductor, Toni Hill fue el responsable de traernos al idioma español a un personaje inolvidable. Aquellos que leyeron los libros lo recuerdan con deleite. Los aficionados a la serie (que se parece a los libros solo en el primero y sin contar el final), de seguro lo echan de menos (y es muy probable que, como yo, detestaran el final). Me refiero a la serie de Jeffrey P. Freundlich.
Si no conocen el nombre, no importa. Los libros los escribió bajo el seudónimo de Jeff Lindsay, al que conocemos como la mente creadora detrás del asesino Dexter Morgan.